Monster.

¡Plaf! Siento como si hubiese estado dormida mucho tiempo.. Y de repente, abro los ojos. Y el mundo está en HD. Me siento viva. Con ganas de dar que hablar. Bien, o mal. Lo importante es que se hable. Tengo la terrible necesidad de vivir a un volumen tan alto, que cada día de mi vida sea comidilla de la ciudad. Y respirar, y sentir que cada golpe y cada lágrima, no han sido en vano, sino que han hecho salir a mi yo más auténtico. Transparente. Fresca. Fuerte. Han despertado.. al pequeño monstruo. Mi esencia es la misma, solo que ahora, si me tocan las narices, muerdo. Y si no os gusta, chupadme un pie.

Bichito.